Este arequipeño, de nombre César Fernando Pantoja Baltazar, no tiene reparos y descaradamente reconoce su delito diciendo “Soy un estafador”. Su modalidad es la de enviar mensajes de texto a los teléfonos móviles de sus víctimas ofreciendo un premio, previo pago de una suma de dinero.
Una de sus víctimas seleccionadas contactó con efectivos del serenazgo para hacerle una redada para capturarlo. Tras detenerlo le encontraron en su poder una relación con nombres de empresarios a quienes pretendía estafar y varios bouchers de depósito.
En la DIVINCRI, donde fue puesto a disposición dieron a conocer que se trata de un reincidente, que ya ha purgado condena en dos oportunidades por el mismo delito.
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